Estudio sobre la igualdad entre hombres y mujeres en el ámbito
laboral realizado en el contexto de las micropymes del medio rural
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con respecto a las microempresas, en este tema
de la formación, el pequeño tamaño se convierte
en una rémora que puede compensarse mediante
esfuerzos concertados de varias empresas vía
asociaciones, clusters,
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redes, etc.
En cualquier caso, la motivación del empresariado
local hacia este tipo de iniciativas pasa por darse
cuenta de la rentabilidad del tiempo dedicado
a la formación y la percepción de su utilidad. El
planteamiento de acciones en esta línea, enton-
ces, no puede ser espontaneo, sino basado en las
necesidades reales, percibidas o no, del empresa-
riado rural en materia de formación y, concretamen-
te, en las necesidades de las empresarias rurales,
diseñando actuaciones que se ajusten a sus po-
sibilidades de participación. En esta línea, se plan-
tea la búsqueda de alternativas a los cursos al uso,
por ejemplo, desarrollando procesos de acompa-
ñamiento o mentoring para empresarios y empre-
sarias, o acciones de benchmarking
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entre em-
presas que evidencien el desarrollo de buenas
prácticas.
¡
La importancia de acercar los servicios de las
entidades locales al empresariado.
Ya se ha visto como la pérdida de parte o la totalidad
de la plantilla incide directamente en la carga de
trabajo que asume la empresaria o el empresario
y, en consecuencia, en el tiempo de dedicación
que la empresa le exige. Tiempo que estas y
estos profesionales restan a otras actividades
como el ocio, la participación pública, etc. Pero
también son tiempos que se restan a tareas
que favorecerían el crecimiento de la empresa,
como búsqueda de información útil, de nuevas
líneas de financiación, de opciones de formación
profesional, de participación en redes sociales,
etc. En todos estos casos, el empresariado pone
de manifiesto la falta de tiempo para aprovechar
estos recursos y el importante papel que podrían
desempeñar las entidades locales a la hora de
facilitar su acceso a los mismos: abriendo canales
de distribución de información, por ejemplo, sobre
subvenciones u opciones formativas, habilitando
los medios para agilizar los trámites de acceso a
las mismas, proponiendo actuaciones ajustadas a
las necesidades y tiempos del empresariado, etc.
¡
Necesidad de romper la visión estereotipada del
empresariado sobre la menor productividad y
disponibilidad de las mujeres.
La evolución que ha sufrido el discurso del
empresariado sobre las medidas de conciliación y
su actitud favorable, en general, hacia las medidas
de igualdad, son el primer paso para avanzar hacia
una ruptura progresiva de los estereotipos de
género. En esta línea, será interesante visibilizar si
realmente el absentismo laboral es mayor en las
mujeres o si su rendimiento en el puesto de trabajo
es realmente menor.
Por otra parte, un factor clave para mejorar la
productividad es el estado emocional, por lo que
generar un ambiente laboral adecuado incremen-
ta la productividad en la empresa, más aún, en
microempresas donde los equipos son muy redu-
cidos y la relación entre sus integrantes y con el
empresario o empresaria, muy estrecha. En este
punto, incorporar medidas de igualdad introduce
79. Concentración geográfica de empresas que comparten el interés por un sector económico y estratégico concreto y generan colaboraciones
permite a sus miembros abordar proyectos conjuntos de todo tipo, desde actividades de difusión y fomento del sector, hasta proyectos de I+D+i, o
de creación de capacidades compartidas.
80. Cosiste en identificar “comparadores” de productos, servicios, procesos de trabajo que evidencien las mejores prácticas en las empresas, con el
propósito de valorar su transferencia a otras organizaciones.
